Un artículo publicado en el sitio web de Harvard Business Review explica que la forma de establecer los objetivos puede determinar si los alcanzarás, y con qué rapidez.
¿Sabías que hay una forma correcta de establecer objetivos que te ayudará a asegurarte de que los alcanzas, y más?
Si fijas tus objetivos demasiado altos, lo más probable es que te encuentres con que te quemas y no los alcanzas, sobre todo si son objetivamente poco realistas. Si fijas tus objetivos demasiado bajos o persigues los equivocados, no aprenderás ni crecerás. Si tomas decisiones acertadas y eliges objetivos adecuados, tus esfuerzos serán más fructíferos.
Rakshitha Arni Ravishankar y Kelsey Alpaio, dos editores de la revista Harvard Business Review (HBR), escribieron una entrada en su blog para Ascend (parte del sitio de HBR) en la que sostienen que, a la hora de establecer objetivos, hay que elegir aquellos que sean realmente útiles, que te motiven y que sean realistas.
Tanto en el trabajo como en la vida personal, es importante tener objetivos a la hora de pensar y prepararse para el futuro. Es crucial ser consciente de lo que tiene que hacer para cumplir sus sueños y visiones. Los objetivos también proporcionan un sentido de propósito a tu vida, pero querrás elegir los adecuados.
Cómo establecer objetivos que te lleven al éxito, según la Harvard Business Review
Ravishankar y Alpaio identificaron cinco puntos clave a tener en cuenta a la hora de crear mejores objetivos que realmente te harán estar más motivado y ser más productivo a la vez que aceleran, al menos un poco, el proceso de conseguir los resultados que deseas.
1. Pregunte por qué
Es fundamental entender las razones que hay detrás del objetivo. ¿Cuál es el objetivo más amplio? Si, por ejemplo, quieres tener éxito en tu trabajo, ¿la verdadera motivación que hay detrás es hacerte rico, poder jubilarte pronto, ser reconocido por tus compañeros, o algo más?
Los editores de HBR explican que entender el “por qué” de tu objetivo te ayudará a mantenerte centrado y motivado. Esto facilitará la comprensión de lo que hay que priorizar y también te permitirá seguir perseverando incluso a través de cualquier situación complicada o difícil.
2. Divide y vencerás
Tu objetivo principal puede ser algo grande, pero centrarte en él puede ser abrumador y estresante, además de dificultar la comprensión de las tareas más pequeñas necesarias para lograrlo. El objetivo principal puede impedirle ver las tareas a las que debe dar prioridad para llegar a su destino.
Sin perder de vista tu objetivo más grande, piensa en cómo dividirlo en pasos y etapas más pequeños. Así podrás ir avanzando en estas tareas, hacer un seguimiento de tu progreso y ajustar tus metas según sea necesario, todo ello mientras te acercas a tu objetivo principal.
3. Establece un plazo (pero deja margen para concederte una prórroga)
Muchas personas se fijan plazos poco realistas y luego se sienten estresadas y frustradas cuando no son capaces de cumplir el plazo y la tarea queda inconclusa. Muchos de los obstáculos que pueden hacer imposible un plazo están totalmente fuera de tu control, y no deberías estresarte por los retrasos causados por otros.
Una estrategia inteligente es añadir un 25% más de tiempo al plazo que te hayas dado para realizar una tarea. Por ejemplo, si crees que necesitas cuatro días para preparar una presentación, date cinco en su lugar. Esto te dará algo de tiempo para hacer frente a cualquier contratiempo o retraso, y no te encontrarás corriendo sin aliento hacia la línea de meta.
4. No te rindas nunca
El objetivo de los objetivos es crecer y aprender, pero según Ravishankar y Alpaio a veces lo importante es centrarse en seguir avanzando y no tirar la toalla, independientemente de los obstáculos y retos que se pongan en tu camino.
Muchas personas nunca alcanzan sus objetivos porque se rinden demasiado pronto debido al estrés, la frustración o incluso la ira. Uno de tus objetivos debería ser simplemente no detenerte nunca. No dudes de ti mismo y sigue perseverando incluso cuando las cosas no sean perfectas.
5. Aprenda de sus errores y déjelos pasar
Todos cometemos errores: es humano e inevitable. Lo valioso es que aprendamos a afrontarlos adecuadamente. No te aferres a ellos y dejes que te dominen de tal manera que el miedo a cometer otro error empiece a obstaculizar tu progreso. Cada error es una experiencia de aprendizaje. Una vez que hayas descubierto la lección que debes extraer de uno, pasa la página y no dejes que se convierta en un ancla mientras avanzas.