En el Día Mundial de la Salud Mental, he aquí algunas de las estrategias de seguimiento que pueden ayudar a los estudiantes a mejorar su salud mental.
Por India Today Web Desk: La educación es un hito crucial en el desarrollo cognitivo, social y personal y pone de relieve diversos reconocimientos y logros de la vida estudiantil, pero la atención a la salud mental pasa a un segundo plano.
En el último estudio realizado por Deb et al., en 2022, el 13,2% de los estudiantes sufre niveles altos, el 46,9% moderados y el 37,7% bajos de ansiedad, mientras que el 27,5% sufre niveles altos, el 34,8% medios y el 25,3% bajos de depresión entre 237 estudiantes de toda la India.
Ciertos casos como el acoso escolar, la vergüenza corporal, la desaprobación por parte de amigos o profesores, la humillación delante de toda la clase, constituyen la base del sentimiento de autoestima, y hacer frente a estas experiencias es excepcionalmente significativo (NCERT, 2022). Los síntomas de depresión, ansiedad, trastornos del sueño, baja autoestima y el consumo de alcohol o drogas están relacionados con los traumas de la infancia (Downey, 2022).
A continuación se presentan estrategias de seguimiento que pueden mejorar la salud mental de los estudiantes:
1. Observar el absentismo de los alumnos
En caso de malestar en la escuela/universidad, los estudiantes se ausentan o faltan a las clases y se alejan de sus amigos y profesores. No interactuar, ser hostil, frío, grosero, antisocial, irrespetuoso, parecer perdido en sus pensamientos y cambiar los comportamientos de grado son requisitos previos para ser identificados por los profesores, los padres y los compañeros.
2. Importancia del autocuidado
La salud mental puede mejorarse mediante actividades de autocuidado como el ejercicio, el yoga, la conexión con los sentimientos, la autorreflexión, la visita a un terapeuta, el mantenimiento de un diario, la pintura, la lectura de un libro y la resolución de un puzzle.
Cultivar las relaciones, pasar tiempo con los amigos y la familia, mantener límites saludables, tiempo para mí y socializar, beneficia la salud mental.
3. Nombramiento de consejeros en las instituciones educativas
Los estudiantes experimentan un empeoramiento de las relaciones con sus amigos y familias y numerosos brotes emocionales.
La designación de un consejero en las instituciones ayuda a los estudiantes a afrontar los problemas de salud mental.
4. Visita a psicólogos/Psiquiatras
Los estudiantes suelen abrirse y hablar de sus experiencias traumáticas durante las sesiones de terapia.
Los profesionales pueden visitar el campus 1-2 días a la semana en los institutos educativos. Los padres pueden llevar a los suyos a ellos al notar cambios emocionales y de comportamiento.
5. Programas de concienciación sobre la salud mental
Es esencial asistir o concertar programas cualificados de concienciación de profesionales de alto nivel relacionados con la salud mental sobre diversos temas, como; la prevención del suicidio, la relación entre padres e hijos, el establecimiento de objetivos, la inteligencia emocional, los problemas de identidad, los problemas cibernéticos, el abuso, el trauma y las señales de alerta de los trastornos de salud mental, entre otros.
6. Educar, formar a los profesores y a los padres
Con la concienciación, pueden captar mejor la gravedad de una situación y ayudar a los alumnos.
Por lo tanto, a los estudiantes les resultará más fácil confiar y compartir sus preocupaciones.
7. Formación de grupos de apoyo
A los estudiantes les suele gustar hablar con sus agentes durante la adolescencia y la juventud. Como resultado, las interacciones en grupo ayudarán a los estudiantes a expresarse, a identificar soluciones y a discernir que no están solos.
Ignorar los problemas de salud mental durante mucho tiempo puede dar lugar a trastornos psiquiátricos graves. Por lo tanto, una obligación es crear una cultura que acepte las diferencias y promueva el bienestar mental en lugar de disuadir a los estudiantes de expresar sus emociones y necesidades.